Powered By Blogger

domingo, 24 de noviembre de 2013

FALSEDADES EN EL EVANGELIO

Hoy día vemos muy a menudo las falsedades y estafas que se producen en el medio evangélico.
Es lamentable ver como falsos pastores y líderes han manchado y llenado de vergüenza el evangelio de Cristo Jesús a través de sus testimonios lamentables de vida.
Han dejado de lado el verdadero mensaje de Cristo, el mensaje de la cruz, del arrepentimiento verdadero, y predican el evangelio de la prosperidad, el evangelio del miedo donde imponen reglas humanas que van en contra a la verdad que nos enseña la palabra bendita de nuestro Dios.
Estos son una vergüenza, una mancha al pueblo cristiano como lo dice Judas en su epístola " estos son manchas en vuestros ágapes, que comiendo impúdicamente con vosotros se apacientan a si mismos, nubes sin agua, llevadas de acá para allá por los vientos, árboles otoñales sin fruto, dos veces muertos y desarraigados. Fieras ondas del mar, que espuman su propia vergüenza, estrellas errantes para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas" Judas12-13,
Hemos visto y escuchado lo que estos falsos pastores les enseñan al pueblo de Dios, muchas veces les imponen cargas tan pesadas a sus fieles seguidores pero ellos nos la mueven ni siquiera con un dedo así como los escribas y fariseos en la época que Jesus en forma de hombre vino a la tierra a redimirnos del pecado, el los llamó hipócritas, sepulcros blanqueados (Mateo 23;3-36).
Han pervertido la causa de Cristo y todo lo hacen por vanagloria y por su bienestar económico, hemos visto a muchos de sus fieles pasando necesidad sin poder pagar sus cuentas pero dando el diezmo y pensando que con esto le están siendo fieles a DIOS, porque en realidad así les han enseñado y les imponen miedo diciéndoles que al no diezmar serán maldecidos y el devorador vendrá sobre ellos. Este asunto del diezmo se lo podemos probar biblicamente que es una mentira, usted puede acceder al estudio uso y abuso del diezmo en nuestro blogger.  Y mientras sus fieles pasan necesidad ellos todos los años se toman sus vacaciones y disfrutan con el dinero que con tanto esfuerzo les cuesta ganar a los trabajadores que concurren a estos templos.
Sabemos que la ira del DIOS todopoderoso vendrá sobre ellos ya que han hecho oídos sordos cuando el Señor les ha hablado.
Pueblo de Dios despierta! no permitas que te engañen con falsas doctrinas de hombres.
Estudia la biblia busca a Dios en la intimidad de tu hogar, pídele que guíe tus pasos, tu tienes libre acceso al trono no necesitas intermediarios aquí en la tierra! Y no pienses que porque no tengas un diploma que diga pastor o evangelista el Señor no te hablará en verdad el desea hablarte, desea que te acerques a el a un corazón humilde y quebrantado el Señor no despreciará.

viernes, 8 de noviembre de 2013

En unas de mis oraciones al Señor de los cielos y de la tierra de todo lo creado y de lo que aun será le dije:
 Señor donde comenzó todo, donde, cuando, como, la sana doctrina  de Cristo comenzó a corromperse?
Donde, cuando tu palabra comenzó a ser distorsionada? Cuando comenzó a ser  enturbiada por doctrinas de hombres?
Hoy no vemos con claridad, tu santa palabra ha sido pisoteada y colocada en un rincón vacío.
Hombres perversos llenos de avaricia han creado su propia doctrina usando tu nombre en vano!
Y lo peor  un pueblo los sigue y no saben que son guiados al seol.
Son tiempos donde la sana doctrina de Cristo parece cosa extraña, ya no la quieren oír!
Muchos de la que oyen no la entienden y la desprecian, otros oyen, entienden y desean seguirte pero están atados al evangelio del terror y del miedo.
Que haremos Señor?
Quien nos escuchará?
Y el Señor todopoderoso me contestó:

“Les escuchará un pueblo pequeño en número pero grande en fuerza y fe, les seguirán aquellos cuyos corazones se humillan ante mi presencia, les seguirán aquellos que buscan más alla de la prosperidad económica, los que no se conforman con la mentira ni la injusticia, los que no se acomodan en las sillas de un templo, les seguirán los que tienen un corazón lleno de amor por mí.

Les seguirán aquellos que aman a Dios por sobre todas las cosas de este mundo

Les seguirán los que luchan por la justa causa

Les seguirán aquellos que en lo secreto me buscan y me son fieles, los que no doblan sus rodillas ante los baales de este mundo.


Les escucharán y seguirán los que me aman en espíritu y en verdad”

sábado, 2 de noviembre de 2013

USO Y ABUSO DEL DIEZMO

Definición: La palabra Diezmo nace de la palabra hebrea “maaser” o “maasrah”, que traduce Diezmo, o una décima parte. En el griego la palabra que designa esta “décima parte” es “apodekatoo” y tanto en el hebreo como en el griego, estos términos significan el “pago o dádiva de una décima parte o porción.” Otra definición dice: El diezmo (del latín decimus, décimo) es un impuesto del diez por ciento (la décima parte de todas las ganancias) que se debía pagar a un reygobernante, o líder eclesiástico.
El pueblo de Israel tenía que destinar al culto y al mantenimiento de sacerdotes y levitas la décima parte de ciertos frutos y animales (no dinero) (ver Deuteronomio 14:22; Levítico 27:32). Era un verdadero impuesto religioso que se tenía que dar una vez al año (no todos los meses ni semanal) (Deuteronomio 14:22). Los fariseos llevaron esta práctica del diezmo religioso hasta la exageración, dando la décima parte de las cosas más diminutas y de insignificante valor, tales como la menta, el eneldo y el comino, pero con olvido de la humildad, la justicia, la misericordia, la fe y el amor, lo cual es una grave equivocación (Mateo 23:23; Lucas1:42; 18:12).
Nos adentraremos en las Sagradas Escrituras para examinar con detenimiento todo lo relativo al diezmo, si debemos practicarlo los cristianos, si está bien como se practica, si realmente nos trae bendición el darlo, etc. Tal vez nos asombremos de muchos detalles que desconocíamos, pero la Palabra de Dios que es la regla suprema de fe y conducta para la iglesia y el creyente nos los enseñará.
El diezmo en las Sagradas Escrituras
Dios pidió que la tribu de Leví fuera sustentada con el 10% de los frutos del pueblo de Israel, para que los sacerdotes levitas se dedicaran tiempo completo al servicio del tabernáculo; y esto debían hacerlo desde los 25 años hasta los 50, que era cuando debían retirarse (Números 8:24-25).
Dios para evitar corrupción dentro del pueblo de Israel, ordenó que siempre el diezmo fuera dado en productos: trigo, vino, aceite, animales, etc; los cuales eran guardados en el “alfolí”, que era un lugar que se encontraba en el templo y que servía de bodega para almacenar los productos generados por el diezmo. Era la manera de sustentar la tribu israelita de Leví, la cual No podía poseer heredades, sino que su heredad era el 10% de lo que rindiere el Producido de la Tierra y los ganados de todas las Tribus de Israel es decir sus ganancias después de haber sacado los Gastos necesarios (Vestido, Techo y Comida) sobre las utilidades sacaban el 10%, pues su labor era dedicarse a ministrar el tabernáculo de Jehová; Del producto de cada año se llevaría el diez por ciento al Alfolí, y de allí comerían todos los Sacerdotes y sus familias. Es falso pensar que ahora se puede diezmar con dinero en lugar de los alimentos por el hecho que no se manejaba como en la actualidad, sino que era más común el trueque de alimentos. Pero en el Génesis se utiliza la palabra dinero alrededor de 44 veces antes de que se mencione el diezmo por primera vez en Levítico 27. Por ejemplo con el dinero se compraban personas para hacerlas esclavas (Génesis 17:12), recargos del santuario (Éxodo 30:12), impuestos del censo (Núm. 3:47), etc. Cuando ya no se tenía dinero era que se recurría al trueque (Génesis 47:15-17).
Muchos líderes cristianos afirman y dicen: “El diezmo es bíblico, porque se nombra muchas veces en la Biblia”. Eso es cierto, pero lo que no dicen es que siempre se menciona para el pueblo de Israel, nunca para la Iglesia. (Levítico 27: 34). En la actualidad se incluyen dentro de las obligaciones para los creyentes preceptos de la Ley que aportan algún beneficio material, como el diezmo y la fiesta de las primicias.  Pero no se  ha puesto interés alguno para incluir en las iglesias la fiesta de Pentecostés, ni ninguna de las seis fiestas restantes que se mencionan en Levítico 23. Si se les pregunta ¿por qué no guardan la fiesta de Pentecostés, o la de los Tabernáculos, o la fiesta de las Trompetas? Ninguno dudaría en responder: “Porque eran para el pueblo de Israel”. Y qué del diezmo.La fiesta de las primicias, como las otras seis fiestas corresponden al calendario judío, para celebrarlas una vez al año.
Algunos líderes sacan de contexto pasajes para infundir miedo psicológico a sus seguidores si no dan el diezmo; como por ejemplo: “Vosotros me habéis robado vuestros diezmos” Malaquías: 3:8. Pero omiten el resto del pasaje, violando todas las reglas de la hermenéutica y de la exégesis bíblica. Malaquías 3:2 y 6, nos explica que los hijos de Jacob (Israel) no estaban entregando el diezmo para sustentar a los sacerdotes y levitas (no para un solo hombre) para trabajar para el pueblo y Dios. La obligatoriedad del diezmo únicamente le concierne al pueblo de Israel por lo que no es universalmente obligatorio como muchos tratan de hacérnoslo ver. En el v.10 Dios promete dar “bendición hasta que sobreabunde” al pueblo de Israel, si primeramente cumplen con la Ley: “Traed todos los diezmos (frutos de la tierra no dinero) al alfolí (cuarto de almacén) y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde“. Los israelitas estaban bajo la Ley y debían cumplirla para que Dios les bendijera, así que los reta para que al cumplir la Ley Él pueda probar su fidelidad, su parte del trato. Los judíos a quienes se d irigía el profeta no confiaban en Dios, por eso el Señor los reta a que lo “prueben”. Así que este pasaje no tiene valor para el cristiano, ya que estamos bajo la gracia, y no podemos ni debemos probar a Dios; Él no nos va a bendecir por cumplir parte de la Ley; además no podemos probar a Dios porque sería ofenderlo principalmente por haberlo dado todo por nosotros, nos dio a su Hijo: “… ¿Cómo no nos dará con él también todas las cosas?” (Romanos 8:32). Si usted depende de la Ley dice Pablo: “todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.” (Galatas 3:10) está bajo maldición si no cumple absolutamente toda la Ley como dijo Santiago: “Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos.“; así que no sirve de nada ser un diezmador fiel sin no cumple los 613 preceptos de la Ley. De esto concluimos que el autor sagrado se está d irigiendo a los que guardan la Ley, al pueblo de Israel, no a la Iglesia. En otras palabras con este pasaje muchos líderes cristianos están diciendo que si alguien no paga, no es salvo; y no tiene lógica y es una enseñanza antibíblica; la salvación es por fe y no por obras.
Otro dato curioso y que no cumplen los que piden el diezmo es que por dos años, el diezmo debía ser llevado al tabernáculo, y guardarlo en el alfolí, pero al tercer año el diezmo de ese año debía ser entregado directamente en las aldeas locales, y ponerlo a disposición, no sólo de los Levitas, sino también de los “extranjeros, los huérfanos, y las viudas” (“Al fin de cada tres años sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año, y lo guardarás en tus ciudades. Y vendrá el levita, que no tiene parte ni heredad contigo, y el extranjero, el huérfano y la viuda que hubiere en tus poblaciones, y comerán y serán saciados; para que Jehová tu Dios te bendiga en toda obra que tus manos hicieren.” Deuteronomio: 14:28-29; 26:12-14), de lo cual no cumplen, y casi me atrevo a asegurar en un gran porcentaje de las iglesias que cumplen el diezmo no lo realizan; no estaría mal que las iglesias hicieran compartir el diezmo con la comunidad formada por los extranjeros, huérfanos y viudas que hubiera en la población alrededor de la misma. ¡Aunque fuese cada tres años! Recordemos que en el Nuevo Testamento tenemos instrucciones respecto a como las iglesias y los creyentes deben cuidar de las viudas y los huérfanos.
Otro dato mucho interesante es Números 18: 20-28;  en estos versículos: 1) se repite que el diezmo será para “los hijos de Israel” y 2) que por tres veces se repite que los levitas no tendrán  posesión (propiedad) de tierra alguna. Así que si lo aplicáramos en la actualidad ningún líder o pastor no podría contar con ni tan siquiera una parcela o carro propio; esto haciendo cumplir como lo estipuló Dios en la antigua Ley del Diezmo
Notemos algo muy importante: en toda la Biblia se observa que el diezmo era dado por los propietarios de las tierras y de los animales; que era lo que se recibía como diezmo. Los sirvientes o jornaleros no diezmaban, ya que ellos tenían remuneración monetaria de lo cual no daban nada. También cuando se recorrían distancia muy largas y no se podía llevar el diezmo en especies por la incomodidad se vendía todo y se llevaba el dinero y se compraba luego en el lugar, y hasta podían disponer de algunas cosas según dictara su corazón (Deuteronomio 14:22-26)
La Ley del diezmo del Antiguo Testamento fue quitada cuando Cristo murió en la cruz y no antes (Colosenses 2:14, Gálatas 5:1; Santiago 1:25).
En Hebreos 7:5-12 se vuelve a señalar que el diezmo era de la Ley;. En este mismo capítulo 7 de Hebreos indica también con mucha precisión que ahora en la gracia, no existen los sacerdotes levitas, porque  hubo un cambio de sacerdocio y de ley: “Porque cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley“.
La obligación de dar el diezmo, siempre ha sido para los judíos, para los que están bajo la Ley. La única vez que se menciona el diezmo fuera de la Ley, y sólo fue una vez, fue cuando Abraham dio el diezmo de su victoria sobre los reyes que habían llevado prisionero a su sobrino Lot. Lo dio una sola vez, y no fue un pago mensual, vea que dice que “dio” en esa oportunidad el diezmo, pero jamás dice que “pagó el diezmo”. Está muy claro que estos bienes o despojos no eran de Abraham, eran de los reyes que había derrotado, no fue fruto de su trabajo ni de sus tierras. Pero también hay que acordarse de que por último Abraham no se quedó con nada, se lo dio todo a Melquisedec (“Que no tomaré ni un hilo, ni la correa de un calzado, nada de todo lo que es tuyo, para que no digas después: ‘Yo enriquecí a Abram’ ” Genesis 14:23), y fue la única vez que dio algo, no se menciona en ningún otro pasaje que siguiera dando ni el diezmo ni ninguna otra contribución. Se ha de notar que no existe ninguna disposición en la Biblia para que alguien puede tomar el lugar de Melquisedec tipo de Cristo para exigir diezmos. El v.2 de Hebreos 7 dice que Abraham le dio a Melquisedec “los diezmos de todo”, pero en Génesis 13:2 dice: “Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro”. Pero ¡que sorpresa! De toda esta grande riqueza Abraham no le dio a Melquisedec un pelo de su ganado ni un solo pedacito de su plata y oro; le dio los “diezmos del botín” v.4 de Hebreos 7. Este pequeño y único detalle basta para cambiar todo el panorama.
Mateo 23:23; Lucas 11:42; Hebreos 7:5:12; Estos son los únicos pasajes en todo el Nuevo Testamento en donde se menciona el diezmo; y fueron básicamente para reprender a los fariseos por hipócritas, y para recordar a Abraham cuando en una ocasión “dio” el diezmo. Así que nunca se pidió a ningún cristiano pagar el diezmo. En el sermón de la montaña, donde Jesús ratificó las verdaderas demandas de la Ley, no hizo ninguna mención al diezmo ¿se le habrá olvidado a Jesús ese detalle tan importante? Si el diezmo fuera una obligación para el cristiano ¿no parece extraño, que no se menciona ni una sola vez en todo el Nuevo Testamento? Entonces ¿por qué las iglesias piden el diezmo. Laiglesia cristiana primitiva promovía la ofrenda voluntaria, y ésta se debía hacer en secreto. El diezmo en la Iglesia primitiva era inexistente. Las enconadas discusiones de Pablo con los que promovían la restauración de ciertas observancias de la Ley, cómo la circuncisión, hace suponer que siendo el diezmo una regulación mínima en comparación con otras leyes ya impracticadas, su sóla sugerencia hubiese dado lugar al reproche. Pablo llamaba a éstos restauradores “judaizantes”. Además los judíos en la actualidad no diezman. Los Rabinos Judíos, quienes en teoría deben de conocer y saber aplicar mejor Ley Mosaica, no cobran diezmos porque ellos saben que únicamente los Levitas pueden cobrar el diezmo.  A causa de la destrucción de los archivos genealógicos en la destrucción del Templo en el año 70 d.C.,  ellos no pueden identificar a los verdaderos Levitas.  Usan un sistema diferente para sustentarse económicamente que trata de tantos dólares por cada asiento en sus sinagogas y así poderle dar mantenimiento y sostenerse económicamente. Entonces, ¿podría algún líder probar que es descendiente directo de Arón para tener el derecho de pedir el diezmo?
El dinero no tiene poder ni beneficio alguno para las bendiciones o dones de Dios: “Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero” Hechos.8:20. Y cuantos hoy en día dan donaciones (diezmos y ofrendas) no por caridad sino por interés, para que les vaya bien en la vida (sanar, conseguir trabajo, salvación de un familiar, solucionar un problema familiar o hasta amoroso); si esto es cierto entonces estamos viendo restauradas las famosas indulgencias de la edad media que dieron inicio a la reforma líderizada por Martín Lutero.
El diezmo fue una práctica divina para sustentar a los sacerdotes levitas, y debía ser entregado en especies, nunca en dinero. A diferencia de esto, ahora, no existe el diezmo ni la promesa de que recibiremos más prosperidad terrenal, todo lo contrario, ahora se nos pide que no nos hagamos de tesoros aquí en la tierra, sino en el cielo. Los primeros cristianos dieron todos sus bienes para repartirlos entre la Iglesia, pero ninguno de ellos llegó a ser rico.
Si alguien le dice que debe de pagar en forma obligatoria el diezmo, no estaría dando libremente como propuso en su corazón, sino que sería una imposición. Guardar la Ley es algo que ofende a Dios, porque las obras de la Ley son obras muertas, (Hebreos 6:1) es decir, obras de mera ceremonia.
En el Nuevo Testamento vemos que la iglesia se financia con ofrendas no con el diezmo, vea 1 Corintios 16, 2 Corintios 8:1-12 y 2 Corintios 9:7, También recordemos que los primeros cristianos estaban en la obligación de dar hospedaje a los ministros de la Palabra: “Amado, fielmente te conduces cuando prestas algún servicio a los hermanos, especialmente a los desconocidos, los cuales han dado ante la iglesia testimonio de tu amor; y harás bien en encaminarlos como es digno de su servicio a Dios, para que continúen su viaje. Porque ellos salieron por amor del nombre de El, sin aceptar nada de los gentiles. Nosotros, pues, debemos acoger a tales personas, para que cooperemos con la verdad.” 3 Juan 5-8 (Hechos 6:14-15; 18:1-3,7). Además cuando Cristo envió a los doce y luego a los setenta, no les enseñó a cobrar diezmos sino a quedarse en los hogares de los justos y a comer lo que les pusieran delante, nunca solicitaron hoteles 5 estrellas ni limusina (Mateo 10:5-15; Lucas 10:1-12).
En resumen:
1-     El diezmo fue mandado por Dios entregarlo en productos a los sacerdotes levitas, nunca en dinero, porque estos no podían poseer propiedades y para que no hubiera corrupción.
2-     El diezmo “era” de la Ley (Mt23:23), “según la ley” (Hebreos 7:5).
3-     En la Gracia debemos ofrendar libremente, como cada uno propuso en su corazón, sin que tu mano izquierda sepa lo que ha dado tu derecha, no se debe hacer en sobre con nombre, la ofrenda debe ser anónima.
Aprendamos a dar libremente y por amor, sin esperar nada a cambio; hagámoslo sin que la mano izquierda sepa lo que ha dado la derecha. No debes de esperar nada a cambio, porque no se puede “comprar” el favor de Dios. A Dios no lo podemos manipular, menos con algo como el dinero. Posiblemente llegue a dar lo mismo que el diezmo o más, pero la gran diferencia está en que no será una carga impuesta y ahí sí vendrán recompensas por parte de Dios. No te engañes pensando que el diezmo que hoy das es tu ofrenda al Señor, porque estarías participando de un mandado impuesto por hombres; acuérdate que lo que dispuso el Señor para la Iglesia fue la ofrenda y no el diezmo que era de la Ley.
En conclusión si el diezmo es una obra indispensable para ser salvo y prosperado estamos bajo la Ley Mosaica y no bajo la Gracia de nuestro Señor Jesucristo, y entonces debemos practicar los demás preceptos, normas, ceremonias y fiestas de la Ley; ya que la salvación no sería por fe y para fe como lo establece Romanos 1:17 y Efesios 2:8-9, sería por las obras del creyente.
Dr. Jesús María Yépez
El autor es Médico Cirujano, Doctor en Teología, Pastor y Profesor de Biblia y Teología en el Seminario Teológico Alfa y Omega de Puerto Ordaz. Venezuela.



Estimados Hermanos:
Se que este es un tema controversial, pero ya es tiempo que revisemos la Biblia y veamos la verdad que esta alli, si su iglesia pratica el diezmo lo debe hacer como lo dice la Biblia para sustentar a los ministros, viudas, huerfanos y demas necesidades dentro y fuera de la congregación, LOS DIEZMOS NO SON PARA UNA SOLA PERSONA O FAMILIA DE ESA PERSONA, LOS DIEZMOS NO SALVAN NI PROSPERAN NI CONDENAN A NADIE. Si usted los hace lo debe hacer libremente y de su voluntad no por obligación ni amenazas y ademas debe ser anonima no en sobre como se acostumbra, ya que esto sirve para saber y controlar a las personas. LA SALVACION ES POR GRACIA NO POR OBRAS QUE HAGAMOS. Amados hermanos sirvamos a Dios con alegría y agradecimiento NO POR AMENAZAS U OBLIGACIONES BAJO AMENAZAS PSICOLOGICA QUE PERTUBAN A LOS CREYENTES, que ya que estos son salvos por el sacrificio de Jesucristo. Espero que este artículo sirva para motivar y profundizar el estudio bíblico, ninguna ORGANIZACION, APOSTOL, PROFETA, EVANGELISTA, PASTOR O MAESTRO PUEDEN ESTAR POR ENCIMA DE LA BIBLIA, todos estamos sujetos a ella, LA BIBLIA ES LA REGLA DE FE Y CONDUCTA PARA EL CREYENTE Y LA IGLESIA EN GENERAL. Quiero anexar unos comentarios enviados por un pastor de Venezuela que parecen pertinentes; Atentamente: Dr. Jesús María Yépez. Médico con Postgrados de Gerencia en Salud y Medicina Nutricional. Doctor en Teología Mención Consejería. Pastor de la Comunidad Cristiana Vida Abundante. Presidente y Profesor de Biblía y Teología en el Seminario Teológico Alfa y Omega. Puerto Ordaz. Venezuela
AQUÍ LE MANDO MAS INFORMACIÓN Y ESTOY DE ACUERDO CON USTED.
El enseñar a nuestra congregación a dar un diez por ciento podría convertirse en una terrible herejía. Dios es nuestro Señor, y dueño de toda la creación. Nosotros, sus mayordomos, le debemos dar y consagrar a Dios el 100% de lo que somos y producimos. Así el 10% podría simbolizar esa entrega, siempre y cuando el espíritu de la ley, y el propósito de la ley del Antiguo Testamento se mantenga fiel. Es decir, si Ud. desea contextualizar la practica del diezmo en su iglesia, considere los siguientes principios:
Si su iglesia diezma, y parte de esos diezmos no se distribuyen hacia los más necesitados tanto fuera como dentro de la congregación, su iglesia le esta robando al Señor.
Si los pastores de su iglesia tienen otras fuentes de ingreso, y en vez de recibir un salario extra, se llevan el diezmo como pago a sus servicios, sus pastores le están robando a Dios.
Si en su iglesia es el pastor y su familia los únicos que a discreción hacen uso del diezmo, tenga cuidado. Ud. podría estar permitiendo que se den abusos con el dinero del Señor. Toda iglesia debe presentarse como un libro abierto al mundo. Todo pastor y líder eclesial debe dar cuentas abiertas, en cualquier momento que se le pida, de la mayordomía a la que se le ha encargado. Siempre es sano tener a dos personas sin relación de parentesco entre si ni con el pastor supervisando los fondos de la iglesia (entre ellos no debe haber ningún pastor ni ninguno de sus familiares).
Si su pastor dice que los diezmos son para él o ella, su pastor le esta robando al Señor, y al Estado al no pagar impuestos. En nuestra sociedad capitalista todo pastor debe gozar de un salario, pagar impuestos, y otros aportes de ley. Tal y como hemos visto, el diezmo no es para el pastor ni los pastores solamente.
Si algún medio de difusión masiva como canales de televisión, emisoras de radio, o prensa escrita solicita de un diezmo, primicias, u ofrenda, a cambio de una bendición particular, ellos están practicando una estafa. Una ofrenda o diezmo no se da para recibir. Se da porque hemos recibido, pero no con la intención de recibir más. Nadie puede asegurarle a nadie una bendición de Dios. Dios es soberano y a su tiempo dará buenas dadivas a los fieles de su pueblo.
Si en su iglesia le hacen, indirecta o directamente, sentir culpable si no diezma. Si en su iglesia es obligatorio diezmar. O si en su iglesia constantemente se explica que los que no diezman le están robando a Dios, y por tanto no reciben bendición financiera. Su iglesia esta practicando una estafa. El diezmo era una práctica obligatoria en el Antiguo Testamento, no así en el Nuevo Testamento. Si se desea contextualizar esta práctica del diezmo, recordemos que en el Antiguo Testamento solo los que poseían los medios de producción (los ricos) se les solicitaba diezmar (aunque si el ofrendar era para todos).
Si su iglesia ha contextualizado (o desea contextualizar) la práctica del diezmo sin considerar el espíritu y propósito de esta practica de la ley en el Antiguo Testamento, su iglesia entonces, no esta diezmando. Su iglesia esta haciendo algo que no debería llamarse diezmo, y hasta podría estar estafando a su membresía, todo por ignorancia teológica.
Finalmente, recordemos que el diezmo (además de las múltiples ofrendas) se daba al templo para cuidado de la infraestructura, y su personal que no poseía tierras ni herencias, y para los más necesitados (viuda, huérfano, extranjero, etc.). Si su iglesia local no cumple el rol de los antiguos templos en la distribución según los principios del diezmo, Ud. no esta en la obligación de diezmar, y aun menos si Ud. no produce riqueza alguna.


Información extraida de la pagina: http://www.iglesiaenmarcha.net/ escrita por el pastor Dr. Jesús María Yépez

Despues de la Caida - Rene Gonzalez